"Escondite"

-Hablando en serio... ¿esa mierda merece vivir?-
-No si no es mi admirador- dije y luego me tape la boca, como si escupido algo. -como diablos pude haber dicho algo asi?- un asco comenso a invadir mi cuerpo
-Vamos, tu sabes que no.
-Tu tampoco la mereces si no te callas.
-Heather, ya dejanos salir, porfavor!!!!-
-Ana, juro que no te sucedera nada, pero por favor espera, aun no es el tiempo nescesario...

Luego recorde las otras habitaciones, siempre habia un mensaje para mi, una frase con segundo significado.
Me di vuelta y vi al empresario, y una sonrisa se apodero de mi, lo habia salvado, a el y a las otras dos modelos, podria con esto, estaba segura.
Me aserque a el y le dije

-Ayudame por favor, tu tienes buena vista, busca algo en la habitacion, alguna pista, o algo-
Luego volvi a jirarme y me enfrente a Berto

-¿hablas frances?, no me lo habias dicho, ¿es que esperabas que dijera algo comprometedor?. Tu eres el que esta mas tranquilo de los tres, ¿acaso sabes algo mas que los otros?

El vagabundo comenzó a reír, Ana se asusto ante aquel sonido. Mateo comenzó a moverse de un lado a otro, suponiendo que el tiempo ya lo había vencido. Por ultimo Raymundo miraba fijamente a Heather, comenzaba a notarse en su rostro la locura pues sus ojos ardían con un fuego extraño, un sentimiento que en esos momentos no tenía ninguna relacion.
Berto encaró a la chica, hablando el Frances que solo Heather y el pordiocero conocian.

-Bién, sabes que, estoy harto- Comenzó a moverse tratando de safarse de aquel dispositivo extraño. Mas aun sus ojos no se despegarón de la chica.

-¿Quieres saber la verdad, no es así?. Toma tu verdad-

Entonces el chico, el educado, el mas "pensante" del lugar, hizo una maniobra desagradable. Su mano derecha bajo hasta la parte mas baja de su abdomen, y tomo su miembro entre sus ropas, mientras con la otra mano le levantaba el típico dedo del medio. El que no había sido nombrado aun, estalló en risas.
Raymundo se movio con mas fiereza al presenciar aquello y Ana se acurrucó mas al vidrio, tratando de escapar. Mateo seguía inmovil. Berto volvio a hablar.

-Soy tu maldito admirador, lo fui desde el momento en que lo supe....- y dejo inconclusa la oracion, como si hubiera tiempo para enigmas. El cronometro había llegado ahora a los 5 minutos. -Sabes, NO LO MERECES!-Comenzó a gritar con fuerza, muy desdichado. -Tú no tienes el potencial...- Entonces las lagrimas salieron de sus ojos. Raymundo observó aquello y volvio a moverse con bestialidad, si seguía hacia se arrancaria la columna vertebral.

El del medio, el que no había sido nombrado seguía carcajeandose, lo disfrutaba en verdad.

-Y ahí lo tienes...- Hizo un ademan de la mano para señalar a Berto. -...Ese que se cree él mejor, ¿Deveras piensas permitirlo?. Juzgarte.... ¿Es lo que devería hacer?. Yo creo que no- Dijo con un susurro, bastante persuasivo. -Devería venerarte, porque tú eres la dueña de su vida, porque tú, puedes aplastarlo cuando desees-
El sujeto mostro sus dientes podridos y amarillentos en una perfecta mueca de maldad.
Ana por su parte seguía llorando, mostrando el típico rostro de la niña debil que añora ser salvada. A su lado Mateo se mostraba inexpresivo, debatiendose entre hablar o no hacerlo.

Al ver como se ponía el adolescente miro hacia un costado, mientras escuchaba al vagabundo
-Y ahí lo tienes...- señalando a Berto. -...Ese que se cree él mejor, ¿De veras piensas permitirlo?. Juzgarte.... ¿Es lo que debería hacer?. Yo creo que no- susurrándome persuasivamente. -Debería venerarte, porque tú eres la dueña de su vida, porque tú, puedes aplastarlo cuando desees-
(hazle caso, sabes que tiene razón)
Su mirada fue a los ojos de Berto y dijo
-tienes razón… lo siento... pero debo estar segura de que lo que dices no es un engaño. Si en cierto que tu me conoces, y tu amigo no esta mintiendo, el morirá, ¿entiendes eso?, por eso necesito que me digas la verdad, ¿tu amigo me conoce?, puede que me halla conocido y el hecho de que me halla conocido le halla provocado una desgracia y no quiera reconocer que alguna ves me admiro, pero tienes que decírmelo, tu vida, la de aquellos niños, la de este –dudando unos segundos- señor y sobretodo la de tu amigo depende de la verdad.

En ese momento fue cuando Mateo comenzó a dudar, titubeando. Sus pequeños labios se abrierón para poder dialogar con Heather.

-Bueno Heather, si analizamos las cosas- Mateo puso una mano en su barbilla, digna de aquel cientifico que indaga todas las partes. Se veía meramente tierno.
Ana por su parte puso los ojos como platos cuando comenzó a escuchar la historia de su hermano.

-Nosotros nunca fuimos tus admiradores, tanto Ana como yó te conocimos por parte de mi hermana mayor. Cecilia era una chica que gozaba de los sentimientos fuertes...- Pero se detuvo en el relato, pues su hermana estaba que hechaba humo por sus ojos.
Mateo era el del medio, estaba su hermana Cecilia y su hermanita Ana, la mayor había muerto por un "accidente"

Entonces todo sucedio muy rapido. El sujeto llamado Berto saco de la parte de atras de su pantalon un revolver. Apunto al niño en su cabeza y apretó del gatillo sin titubear. El vidrio hizo un sonido hueco y la bala regreso a donde estaba anteriormente, destrozando la mano de Berto en el proceso. El interpelado tiro un grito de dolor.

Ah Ana parecía que sus ojitos se le iban a salir de su lugar, y las lagrimas fueron casi instantaneas, sin embargo había algo en aquella escena de dolor que mostraba todo su cuerpo... algo "sobreactuado".
Raymundo, quien parecia el mas loco de todos, dejo de retorcerse y guardo silencio. El ultimo sujeto, miro a Heather a los ojos. Como diciendo "Te lo dije". Inclusive el empresario, quien se había convertido en una sombra por su poco intromision en ese reto, dio un respingo cerrando los ojos.

Cuando el dolor sesó, Berto por fin pudo dar su explicacion.

-Bién, el era el elegido, ahora aprieta su boton para poder salir de aqui.- Mas sin embargo, los ojos y la cabeza del muchacho nunca subieron la mirada, la tenia clavada en el suelo... era como si le hubiera fallado a alguien.

Todo era un completo caos, y eso no me servia de nada. ¿Servirme a mi? ¿De que me estaba sirviendo todo esto? Eran sus vidas las cuales estaban echándose a perder. Se estaban matando a si mismos con sus mentiras. Todo era demasiado…
Me di vuelta y vi al empresario, me pregunte cual seria su nombre.
Camine hacia el y le dije sonriendo y casi sin vos
-Esto me agobia, ¿sabes? Siento como si hace días que estoy aquí, y solo han pasado unos minutos -mirando al cronometro- la ultima ves tenias razón, así que dime, ¿Quién crees que no es mi admirador? Porque viéndolo así, parece que ninguno lo fuese.
Me quede en silencio, esperando su respuesta

De pronto todo a su alrededor parece detenerse. Una voz se escucha en todo el lugar y unas enormes luces se encienden alumbrándola.

-¡Bravo!- dice la misteriosa voz, ronca y áspera -Creo que estás entendiendo... Tú estás en mis manos, y vamos a jugar un juego... Si amas tu vida lograrás salir, sino... Le harás un bien al mundo muriendo...-

Todo parece desvanecerse alrededor de Heather y de pronto aparece en medio de una habitación, rodeada de varias personas desconocidas.

-¿Y tú quien eres?- dice una mujer que se encuentra allí.
-¿Otra más?- replica un hombre.
-¿Por qué estaremos aquí?...- dice suspirando un chico que también está allí.

A esta altura ya no entendía absolutamente nada. Estaba agotada por completo y al cambiar de escenario, no me sentí para nada sorprendida.
-¿Y tú quien eres?- dice una mujer que se encuentra allí.
-¿Otra más?- replica un hombre.
-¿Por qué estaremos aquí?...- dice suspirando un chico que también está allí.
No preste atención a aquellos y mis ojos se movían buscando al empresario
-empresario?, donde… donde estas?-
Al ver que no lo veía (o por lo menos en ese instante) digo en vos alta.
-Mi nombre es Heather… ¿Qué mierda esta pasando?

Un reproductor de cintas yace tirado en el suelo con un sobre al lado. La mujer que antes había hablado se acerca al paquete que está allí y lo toma.

-Dijiste que eras Heather, ¿no?... Esto es para ti...-

Una vez que Heather abre el sobre puede ver una pequeña cinta de casette dentro. La coloca en el aparato y la voz comienza a hablar nuevamente.

-Hola Heather, ahora mismo debes estar en una habitación con dos hombres y otra mujer. Todos se preguntarán que está sucediendo. Los cuatro tienen dos cosas en común. Una, sus vidas no valen nada. Dos, tienen un don especial. En este momento tienen un veneno inyectado en su sangre. El antídoto para él se encuentra en el piso más alto de la casa, pero para llegar a él deberán seguir determinadas pruebas. Solo hay un antídoto. Solo uno vivirá, pero si no se ayudan, todos morirán... Daniel, Thomas, y Kristen, ellos son tus compañeros... Tienen hasta las 10 de la noche para salir, sino morirán. Que comience el juego...-

Después de escuchar aquello lo primero que se me ocurrió fue…
-¿Qué hora es?- pero claro, como podría saberlo.
Mira a mi alrededor buscando pistas. Hasta que recordé la frase “don especial” y mis ojos fueron hacia los demás.
¿Acaso ellos tendrían una habilidad como yo?
-Tu eres Kristen, no? Sabes a que se refería con “don”?
- somos cuatro con un solo antídoto… no importa como, debo obtenerlo si o si

Kristen queda algo confundida, no sabe si hablar o no. Está asustada.

-Eh... Qui...quizás... Él...él...- dice tartamudeando de los nervios.
-Ya basta, como es posible que ni salgamos de aquí para que ocultarlo, es obvio lo que quiso decir, todos tenemos una habilidad sobrenatural... Yo, por ejemplo, puedo hacer esto...- dice el más joven extendiendo su mano hacia arriba. De pronto salen unos pequeños rayos azulados de ella -Me llamo Daniel, y creo electricidad...-
-Entonces... ¿somos todos fenómenos?...- pregunta el otro hombre, Thomas.
-Eso parece...- replica Kristen suspirando.
-Yo... puedo hacer esto...- dice y luego cierra sus ojos y parece desvanecerse en el aire -Me vuelvo invisible...-
-Parece que la más inutil aquí soy yo... Puedo escuchar a grandes distancias y muy bien, pero aquí dudo que sirva de algo...-

-bromeas?- le digo a Kristen, esa es extremadamente util- podrías saber si ahí algo del otro lado de la puerta, o si se activa algún interruptor, o si hay alguien mas en el edificio. ¿Porque no vuelves a escuchar la cinta a ver si pedes escuchar algo que lo halla grabado muy bajito a propósito?- y luego se unos segundos digo -yo puedo manipular la oscuridad a mi antojo, hasta volverla sólida. Vamos- mirando a los hombres- mientras ella revisa la cinta, busquemos pistas o algo para salir de aquí-

-Está bien...- dice Kristen tomando el reproductor de cintas.

Kristen escucha detenidamente todo, cada sonido, cada palabra, cada vibración. A lo lejos, como si fuese un imperceptible zumbido logra escuchar algo "Pura, clara y cristalina... hache y o...".

Mientras tanto Daniel y Thomas intentan buscar algo con Heather pero Kristen los interrumpe.

-Escuché algo, "Pura, clara y cristalina, hache y o"- dice Kristen algo confundida -Tan solo eso...-

-Agua...- dice Kristen en voz alta. Luego cierra sus ojos.

Kristen escucha atentamente todo en la sala, hasta el más mínimo sonido. De pronto abre sus ojos.

-Hay una cañería por allí...- dice apuntando su dedo hacia una pared -Estoy segura que hay algo allí... Tenemos que romper la pared, dentro debe de haber algo...-
-Está bien...- dice Daniel.

Daniel le da una gran descarga a la pared, debilitándola, haciendo que con unos golpes sea más fácil de romper.

-Bien, tú dijiste que podías manipular sombras, ¿podrán romper la parte en donde golpeé la pared?-

Thomas observa callado todo.

-ni lo preguntes- le responde
Heather se separa bastante de la pared y se pongo en posición de dar un golpe, aunque estaba lejos de la pared. Nadie notaba la diferencia, pero de ponto comenzaron a notar que frente de la pared, estaba completamente oscuro, no se podía ver absolutamente nada. Sin esperar más, Heather da un golpe al aire. La oscuridad que estaba flotando en frente de la pared, se movió rápida, brutal y efectivamente contra la pared. Rompiéndola.
-ni pregunten como hice eso... ya que también puedo materializar la oscuridad- dice con un tono completamente natural, y se acerca a ver que hay dentro.

Los ladrillos de la pared caen al suelo despedazados, dejando ver la oxidada cañería, que, en el impacto se rompe y comienza a tirar agua en grandes cantidades. Otras estructuras colapsan del impacto y el lugar comienza a llenarse de agua. De pronto un altavoz se enciende.

-La sala ha comenzado a llenarse de agua, tienen treinta minutos para salir de aquí antes de que el agua llegue al techo. En el fondo de la sala hay dos puertas, una azul y una verde. Las dos están cerradas, la llave se encuentra al lado de la cañería que rompieron en primer lugar. Solo una puerta da a la otra sala, descubran cual es la correcta. Y Daniel, no intentes usar tu electricidad, o morirán todos electrocutados-

-Mierda!- de una forma desesperada, Heather trato de tapar la pared, creando capas de oscuridad que cubrían parte de la pared.
-HAY QUE TOMAR LA LLAVE- grito mirando a todos lados a ver si podía verla-

Off: perdon, ando sin inspiracion

-Tienes que descubrir la pared, las llaves están donde está la cañería, eso dijo la voz...-
-Si, yo creo que ella tiene razón, dijo eso...-

Daniel maldice por lo bajo al hombre que los encerró allí. Con su poder y el de Heather combinados les habría sido fácil abrir las puertas, pero ahora tienen poco tiempo y deben encontrar esas llaves.

-Saca la maldita sombra de la pared... Yo voy a encontrar esas malditas llaves...- dice Daniel muy decidido

Off: No pasa nada On:

-Bien- dice mientras hacia desaparecer la pareds de oscuridad- oye tu!- mirando a Thomas- ayudanos a buscar la llave!
Mierda, deberia haber algun truco… Kristen, puedes escuchar algo?

-Hay dos puertas, intentaré ver cual de las dos es la correcta, quizás se escuche algo detrás de ellas...- dice Kristen mientras se echa a correr hacia las dos puertas.

Thomas y Daniel buscan desesperadamente las llaves a pesar de lo difícil que lo hace el hecho de que el agua no deja de caerles encima. De pronto Thomas logra verlas. Toma una gran llavero y lo saca del agua.

-¡Aquí están!- grita contento, pero su cara cambia rápidamente -Pero que mierda...- dice algo molesto al ver la cantidad enorme de llaves que tienen en sus manos -¿Y ahora qué? Debe de haber como cien llaves ahí, no hay manera de saber cual es la correcta...- dice algo desalentado.
-No sé como, pero encontraremos la forma de salir...- dice Daniel muy decidido mientras toma las llaves y se dirige a la puerta.

Me quede en silencio y luego tome las llaves de la mano de Daniel, y las observem tal ves habria alguna que tuviese algo diferente, que se paresca a las cerraduras. Luego de devolverselas, tape lo mas que pude la pared de donde salia toda el agua.
-Tratare de bloquear el agua lo mas que pueda, ustedes busquen la llave correcta!

Todos intentan abrir la puerta. Prueban y prueban llaves y ninguna parece funcionar.

-Es imposible no hay manera de abrirla, las llaves son muchas como para saber cual es la correcta-
-No se rindan-
-Yo abriré esa puerta, pero necesito tu ayuda- le dice a Heather -¿Puedes sostenerme en el aire con tus sombras?-

Me quede en silencio unos segundos, sin entender dije dudando
-Claro, te levantare lentamente y dime a que altura te dejo.
Debajo de sus pies se creo una especie de piso negro, que comenzó a elevarlo como un ascensor, lentamente, para que no perdiera el equilibrio.

-Ahí está, listo- dice Daniel cerrando sus ojos unos momentos -Bien, no sé si sobreviva a esto, pero abriré esa puerta...-

Daniel extiende sus dos manos y grandes ráfagas de energía comienzan a salir de ellas golpeando la puerta que sale despedida por el impacto sin embargo tiene un costo. El cuerpo mojado de Daniel comienza a ser atacado por la electricidad que genera el mismo.

-¡Huyan, no puedo controlalo! Ya está abierto, ¡corran!-

-NO!- grite aterrada, mire a Kristen y a Thomas.-Entren rápido!.
No espere mucho y entre, pero aun arrastrando con las sombras a Daniel. Pero si veo que se descontrola, creo una capada de oscuridad alrededor de su cuerpo, a excepción de su cabeza, para que respire. Cuando hayan entrado, ordeno a que cierren la puerta.