Por las calles de Barcelona

Candice pestañeo una y otra vez, tan graciosamente que los chicos le mirarón con un poco de extrañesa en su rostro.

-Dejenme pensar-

La chica puso su dedo indice en sus labios... y levanto sus ojos hacia el cielo, tambien puso su brazo y mano derecha en su cintura, adoptando una tipica pose de pensamiento.

Despues de unos pequeños segundos, la chica dio un pequeño salto en su estomago como si una gran idea le viniera a la cabeza.

-Yo soy nueva en este país... lamento no poder ayudarlos-

Candice torcio el ceño, mientras buscaba alguna cosa en su bolso y dejaba en el suelo su maleta, la cual no era muy espaciosa.

-Supungo que esto podría ayudar-

Candice saco un manojo de dolares, producto de su trabajo en los diferentes paises que había viajado, despues de todo Psicologos se necesitaban en todas partes. En estos días todo el mundo estaba loco.

Santiago mira extrañado a la mujer, ¿Por qué les da dinero siendo que ni los conoce? ¿Por qué Florencia parece tenerle tanta confianza?

-Muchas gracias...- le dice algo confundido
-Tú eres como nosotros, ¿no?- le dice Florencia muy decidida
-Flo... no creo que sea...-
-Ella no es mala, no sé por qué pero lo sé. Ahora dime, ¿eres como nosotros?-

Florencia parece muy decidida en probar que la mujer que se encuentra frente a ellos tiene alguna habilidad...

De repente Santiago vi 2 caras conocidas y la de una joven que nunca habia visto, eran 2 ancianos, los abuelos de Fede, pero que hacian ahi ? como es que llegaron y lo mas importante de todo... estaban cargando un paquete, que contenia el mismo? los ancianos se acercaron rapidamente a el
-TU eres amigo de fede no es cierto? si te recuerdo del barco... paras el tiempo... ahhh me alegro de que estes aqui... mira justo te estabamos buscando... necesitamos ir al hotel... (no voy a dar nombre XD) es de suma importancia... te molestaria darle abenton a estos 2 pobres ancianos ?-

La situación era muy extraña. Santiago parecía no entender nada, pero al ver las caras de los abuelos de Fede, y el hecho de que habían hablado de su poder tranquilamente frente a la mujer que estaba allí, no lo duda y cerrando sus ojos los teletransporta nuevamente al hotel...

Elle andaba casi arrastrándose por las calles, sujetandose el brazo con gesto dolorido. La sangre manchaba su manga blanca, mientras procuraba moverse por los sitios menos transitados.
Por suerte, había conseguido salir del edificio antes de la explosión, pero eso le había causado unas buenas heridas a tener en cuenta.
Casi exhausta, se dejó caer en un callejón de una calle sin público, oculta de la la luz del sol.

El sujeto caminaba por las calles, traía en sus manos un artefacto muy extraño y en la otra un celular, el audicular del segundo aparato mencionada estaba en el oido derecho del sujeto.

-Claro mi señora, en estos momentos la estoy buscando pronto iremos a su ubicacion-

Dicho lo ultimo el grandulon colgo la conversacion y guardo su artefacto en el bolsillo del pantalon. El otro aparato era una especie de mapa pues el chico no paraba de mirarle.

Por fin llegó a su destino el cual era un oscuro callejon sin mucho peaton que lo observara, en el fondo oculta en las sombras se encontraba su destino, su objetico. La pequeña rubia de ojos hermosos y caracter fuerte parecía estar dañada pues sangraba mucho de un brazo... su camisa ya estaba completamente manchada de aquel color marron caracteristico.

El sujeto se acercó a aquella bella chica, sus ojos se iluminaron pues tanta belleza nunca lo había visto... y eso que el chico habia "vivido" demasiado como para conocer de la vida.

-Mi señora... ¿que es lo que le ah ocurrido?-

El joven que estaba en su frente era alto, de una piel palida y blanca, el cabello oscuro y corto, su vestimenta era muy informal. Un pantalon de mezclilla algo holgado con unos tenis deportivos y de color blanco. Una camisa de color negro pegada al cuerpo... por lo tanto dejaba ver el excelente cuerpo que este tenia... para finalizar tenia una gorra de color blanco y ajustada a el lado derecho.

El joven toco delicadamente el brazo de la chica que se encontraba contra la pared.

Elle, lejos de ser confiada, se encogió algo más sobre sí misma, mientras unos pequeños rayos aparecián en la mano de su brazo sano, una pequeña muestra de poder, que esperaba sorprender al incauto peatón. No quería ayuda, por mucho que la necesitara.

Observó al chico con atención. Desde luego no se parecía a cualquier otro que hubiera visto antes. Apuesto, guapísimo, educado. Pero con un matiz fuera de lo norma. Es posible que fuera... ¿como ella?

- Nada... un fallo técnico-dijo mientras se estremecía levemente ante su contacto.

¿Por qué no se asustaba? Cada vez quedaba más claro que no era una persona normal. Además la había encontrado tan fácilmente... y los artilugios que llevaba.... ¿quiza era miembro de la Compañía?

- Mi nombre es Elle.-susurró.

El chico le tomo de su brazo, al ver las pequeñas chispas que estaba produciendo.

-Vamos que tu no eres un artefacto-

La levanto lo mas brusco que pudo pues había escuchado aquella necedad que siempre le disgustaba. No podía creerlo habia encontrado una persona inigualable, pero con las mismas ídeas estupidas y debiles que todos los demas... eso era lo que mas disgustaba a el joven.

La llevo casi a rastras... aunque sin perder la seguridad de que ella estuviera bien. Solo pudo salir un poco del callejon, cuando estuvieron fuera el sujeto tomo una chaqueta color cafe y un poco grueso, la uso para tapar el cuerpo de la muchacha de esa manera nadie notaria la mancha de sangre de su camisa.

-Iremos a con nuestra jefa....-

El chico se paro de frente, esperando a que la otra reaccionara pues no iba a permitir semejante atropeyo.

-Por cierto, me llamo Emmet Cullen-

El chico se quedo mirando los pequeños y hermosos ojos que tenia la chica... algo en ella le había cautivado.

- Mucho gusto..-dijo la chica sin muchas ganas de hablar, mientras cogía los bordes de la chaqueta y los apretaba más contra su cuerpo, muerta de frío.

- Démonos prisa...-ya no tenía ninguna duda de que también era un agente y visto lo visto, igual que ella. Con habilidades. -No es una herida muy grave pero si muy aparatosa... estoy perdiendo mucha sangre...-dijo, sujetándose aún el brazo a un costado.

La ultima noticia que tenía era que Ángela estaba en Francia. ¿Cómo demonios iban a llegar antes de que la chica se desangrase? Rezó porque Emmet tuviera alguna idea para eso.

-Además... tengo que comunicarla algo... pero perdí mi teléfono... sé donde esta Sylar.-susurró.

Empezaba a perder la consciencia por el sobre esfuerzo y se apoyó con suavidad en el chico.

- Sácame de aquí....

Emmet sintió cuando la chica se recargaba en el, ese mimo "algo" que había sorprendido a el chico le insitaba a ayudarle... a protegerla. La tomo en brazos como un recien esposo toma a su recien esposa y camino unos cuantas cuadras abajo. Por fin al llegar a su destino, un auto de color rojo deportivo los esperaba, el joven metio a la chica dentro y para tratar de ayudarle, le fabrico un torniquete con una camisa de repuesto que Emmet siempre llevaba en el aciento trasero, por supuesto que aquella prenda estaba bien limpia y cuidada.

-Descuida Elle... llegaremos muy pronto-

El chico palido.. aceleró.. como si fuese al mismo infierno. Por las calles el trafico estaba por los pelos, pero el joven tenia una destreza manejando que nunca detuvo su paso. Unas cuantas cuadras bastaron para llegar a lo que parecía un pequeño consultorio medico.

Emmet volvio a realizar el mismo trabajo.. parecia que ahora la rubia estaba desmayada.

Sin pensarlo dos veces entraron, el joven cruzo palabras con el Dr.

-Curala... ah tenido un percanse.. y que sea rapido pues el alto mando nos necesita-

El Dr. el cual parecía un mismisimo esclavo se llevo a la chica rubia. Por su parte Emmet siguió sus pasos... no dejaria ni un momento sola a Elle.

Elle abrió los ojos lentamente, cegada por la brillante luz de los focos de la sala.
Gimió por lo bajo, aún dolorida, e intentó incorporarse en la cama sin mucho éxito.
Su brazo herido, descansaba sobre su pecho, con un cabestrillo sujetándolo para que no se moviera mucho.
La chica, giró la cabeza suavemente al notar que no estaba sola. Sonrió levemente a Emmet mientras articulaba un gracias con los labios, que no llegó a sonar. Estaba muy cansada.
Frunció el ceño levemente. Aún había cosas que hacer, y no podía estar así. Debían irse para cumplir con sus cometidos, como buenos agentes. Pero lo cierto era que aún necesitaba reposo.

- ¿Puedo... salir de aquí?-preguntó al chico con un hilo de voz mientras le miraba.

Emmet seguía observandola... le gustaba ver su cuerpo placido mientras dormía, a el chico le parecía que así estaba perfecta. Al darse cuenta que la mujer volvio a abrir los ojos Emmet no pudo mas que verla, no sabía porque pero los ojos de la otra le impactaban y no tenía intension de dejar de observarlos.

Al escuchar la petición de la mujer este simplemente sonrió, dejando ver unos dientes perfectamente cuidados pero sobretodo unos colmillos ligeramente mas sobresalientes que los de la mayoria de las personas.

-Elle, entiende que no eres una maquina ni un artefacto... eres un ser humano y necesitas descansar-

Emmet movio su cabello rubio y ondulado, simplemente porque se le apetecia y se levanto de su lugar. Apesar de que aquel "consultorio" era muy solitario y pobre, la habitación donde se encontraba la chica se notaba galante y hasta tenia una ventana donde podías observar lo que afuera pasara. El joven se puso frente a la ventana y comenzó a jugar con sus manos muy extrañamente... Elle seguramente no entedería porque estas se movian a una velocidad poco comun.

Tomás sale del hotel y comienza a caminar tranquilamente en medio de toda la gente. Al menos algo parecía haber salido bien en su día, ver a esa niña con la que había soñado le da ánimos, una razñon para intentar luchar contra ese futuro.

"Yo... en realidad seré así, seré realmente un monstruo... Él, él siempre tiene que ser el héroe, va a evitar que eso pase, pero... ¿por qué no estuvo cuando lo necesitaba?... Mamá... ¿en dónde estarás?" piensa tristemente mienras sigue caminando.

A pesar del sentimiento que lo carcome por dentro, su rostro no muestra expresividad, parece no estar sintiendo nada...

La chica volvió a sumergirse en un reparador sueño, demasiado agotada física y mentalmente como para cumplir sus deseos.

Pasaron varias horas, hasta que delicadamente volvió a abrir los ojos.
Ya estaba lista.

Llamaron al médico que le confirmó el alta, y en pocos minutos, ambos abandonaron el edificio.

Elle se estremecía de vez en cuando, con los brazos doloridos por las vias intravenosas que hasta hace poco tiempo habían atravesado su piel.

- ¿Hacia donde nos dirigimos?-preguntó seriamente, mientras caminaba cerca de Emmet. No dejó de notar que varias personas, especialmente de sexo femenino, se paraban a mirar a cu acompañante.
Era realmente apuesto.

Pero parecia que Elle no se había dado cuenta, Emmet habia estado todo el tiempo fijandose en ella en su rostro. El sujeto no dejaba de clavarle sus enormes ojos... de un color miel muy especial... a la pequeña chica. O por lo menos se veía pequeña al lado del oso Emmet, pues la complexion del chico a su lado era precisamente esa, la de un oso polar. Poseía la fiereza de ese animal, pero al mismo tiempo su belleza.

Sin dar aviso a la pregunta de Elle, Emmet la sujeto de la mano entrelazando sus dedos y llevandola hasta la puerta del copiloto, era menos objetar que cualquier intento de la rubia para safarse, no resultaria, no había forma de ganarle al palido en fuerza.
Emmet abrió la puerta y le invito a la rubia a entrar, solto su mano y paso rapido por enfrente del auto. En unos instantes ya estaba al volante, ronroneando y dando señales de que iba a arrancar.
Aproximo un poco su cabeza hacia la rubia, que permanecia de pie fuera del coche.

-Vamos a ir a el aeropuerto, ¿contenta?- El tono de su voz era tan perfecto, ademas de que, al terminar la oracion se escucho un sonido extraño, producto de una carcajada ahogada.

-Vamos Elle, perderemos nuestro avion-

Dijo de nuevo y adopto una posicion de impaciencia frente al volante.

La chica rubia le miró algo confundida, hasta que finalmente le brindó una gran sonrisa, y entró en el vehículo, sentándose en el puesto del copiloto.

- Y... ¿que pintamos en el aeropuerto, Emmet?-preguntó la chica suspicaz, mientras cruzaba las piernas, y jugaba con unas pequeñas descargas entre sus manos.

Estaba claro que ibamos a ir a la Compañía, o a hablar con Ángela, si no se equivocaba. Pero no quería agotar la conversación con el apuesto joven. Le molestaba estarse quieta o sin nada que decir.

Sus ojillos claros vagaron del salpicadero a la carretera, para después reposar en el rostro del chico, a la espera de una respuesta.
¿Qué habilidad tendría?

Emmet puso su cara rigida, su piel la cual se asemejaba a la de una pared de marmol bien detallada, se puso mas rigida aun. Daba el aspecto de algo... "mounstroso".

-No lo se, me han dado luz verde para hacer contigo lo que quiera. La pregunta es... ¿Que es lo que quieres tú?-

Por mas que se esforzaba su voz siempre le quitaria eso que su rostro demostraba, su voz era bastante varonil, y a la vez como un canto angelical. Por alguna extraña razón Elle se sentia muy segura a su lado. Fue cuando se dió cuenta, Emmet mantenia la mirada fija en su rostro pero... ¿la carretera?... los autos pasaban como estrellas centrifugaz, en cualquier momento podrían estrellarse. El joven se dio cuenta del repentino nerviosismo de la rubia, añadio con su dulce y firme voz para calmarla.

-¿En serio crees que podríamos morir?. Mientras estes conmigo no temeras a nada-

El musculoso esbozó una sonrisa de lado, bastante picara, bastante pretenciosa... y por supuesto bastante hipnotizante. Elle comenzaba a pensar si su poder, era el de ser hermoso... o perfecto.
El joven mojo un poco sus labios, aparto la mirada de los enormes y bellos ojos de la rubia y dijo con un tono de emocion, su cuerpo comenzaba a emocionarse... parecia un pequeño niño a quien le regalas un juguete nuevo.

-¿Y, bien?- Pregunto aun con entusiasmo.-¿Que es lo que deseas hacer?-

Volvio a mojar sus labios, fue entonces que Elle se dió cuenta de los miembros de su dentadura que sobresalian mas... sus colmillos, los cuales porsupuesto eran tan bellos como su dueño.

Juno se había alejado ya de la Casa Alquilada puesto a que ya el grupo se estaba disparciendo y no quería formar parte de un grupo cuyas ambiciones fuesen más ligeras que el aire y a la vez tan difusas como la oscuridad...

Tras unos minutos de caminata en los alrededores, Juno observaba detenidamente el frondoso Ambiente que le rodeaba...muchas y muchas hectáreas de casas con frondosos jardínes en su porche. Autos caros yacían estacionados en los garages, y una ligera brisa se dispersaba por las calles haciendo caer hojas de los arboles..

Ya no tenía Rumbo. Me habían alejado contra mi voluntad de mi lugar de Origen, y aunque no supiese realmente en donde me crié la prisión desde todo este tiempo había sido mi hogar, puesto que era todo lo que conocía, lo demás era Ajeno a mi..

Incluso todo esto era magífico para mi vista, al menos en este viaje, logré aprender y ver las cosas nuevas y maravillosas que hay en el mundo, pensando en eso logré calmar mi enojo por el tiempo que me habían hecho perder antes..

Estaba lejos, de la prisión y no sabía donde empezar a buscar mis respuestas...Segun me dijeron este es otro coninente, y un inmenso Océano me separa de mi primer hogar, no sabía si las respuestas las encontraría aqui o allá, pero sabía que si volvia a Estados Unidos, todo sería más problematico, puesto a que es posible que por allá aún estén en búsqueda de mi paradero, pero era posible que si hubiese un primer lugar para buscar ese sería sin duda..

Mientras meditaba caminaba por los alrededores, sin rumbo alguno viendo los Autos pasar uno tras otro con su rumbo esablecido...

Yo tenía que encontrar mi Rumbo, y este era el momento, ya me habían inundado la cabeza de promesas falsas, eso no pasaría de nuevo, de ahora en adelante me dedicaría a mi y solo a mi...Ya nadie me importaba mas que yo..

Mientras caminaba me decía a mi mismo... ( Será que vuelvo a EStados unidos?? ......Si.... tal vez eso sea arriesgado pero es lo mejor, no tengo nada que hacer más en este país )

Tras ese pensamiento el sonido de una Sirena policial detiene mi marcha derrepente..

Asimimo se Acerca velozmente hacia mi un Auto policial, y detiene su marcha para posicionarse al lado mío en la carretera..

Lentamente el conductor baja el vidrio de la puerta dejando mostrar su Rostro cubierto con unos grandes lentes oscuros ...

Su actitud era muy seria, se veía que no se había detenido para saludar...Curiosamente este sotenía una una hoja de papel en la que estaba dibujada a lápiz el rostro de una persona...

Tras enfocarme bien en la imagen me sorprendió al ver que el sujeto que yacía dibujado era....YO!!!

De ese modo doy un paso hacia atrás por la sorpresa, y no se le hizo dificil al oficial leer mi lenguaje corporal razon por la cual toma un comunicador diciendo: -Lo tenemos...- Asimismo este baja del Auto y se hacerca lentamente a mi sacando sus esposas con una mano y apuntandome con la otra con mucha precaución...

-Ni se te ocurra moverte muchacho- dice en tono amenazante..

Inmovil permanezco ante las palabras del oficial, apesar de poder deshacerceme de el en el acto me quede por ese momento pensando si todo esto era por aquel Accidente en la joyería o por que habían venido tras mi rastro desde Estados Unidos..

La verdad las 2 opciones eran malas, y tenía que hacer algo, si quería salir de alli.

Ya las sirenas de las demás patrullas se escuchaban desde la lejanía, si no actuaba rapido esto se convertiría en todo un infierno

Unos hombres totalmente diferentes a los de la policia aparecieron, no llevaban trajes y eran mas bien jovenes, uno de ellos no tendria mas de 15, Juno no pudo llegar a distinguirlos, era como si algo nublara su vision
-Tranquilos caballeros nosotros nos encargamos... somos de Inmigraciones...-
Una charla inicio entre ambos bandos, pero Juno no entendia nada, algo estaba dandole una terrible haqueca, antes de que se diera cuenta ya no estaba en españa... estaba... en una carcel ?
tanto lio solo para volver a donde se encontraba? pero esta vez era diferente... sus poderes no funcionaban, apenas si tenia fuerzas para moverse. Al parecer esa "compañia" de la que oyo hablar a varios era peor de lo que se imaginaba

OFF: sigue aqui

https://heroes-rol.foroes.org/estados-unidos-f29/carcel-misteriosa-t501.htm#14883

José y Ashley ya habían comprado la ropa que tanto le interesaba a la chica, estos al haber terminado se comieron un helado, y en estos momentos se encontraban en las calles de barcelona en camino al hotel.

La Niña caminaba alegremente por la acera como si una danza infantil se tratara. A diferencia José tenía sus brazos repletos de bolsas de tiendas de ropas.

(Vaya.. a pesar de ser tan pequeña ya es toda una compradora compulsiva) Piensa José mientras caminaba con Ashley dejando escapar una pequeña sonrisa ante lo que acababa de pensar.

Este con dificultad mira su reloj.. (5:00 pm!!)

-Wow que tarde es.. como pasa el tiempo mientras se compra..Mmmm como me recuerda Ashley a ella....ambas eran igual de obsecionadas con las compras....Por cierto Ashley que opinas?? pedimos un taxi o caminamos hasta el hotel?? Mis brazos desearían lo primero jeje- Dice sonriendo..

El momento era ameno. José no podía esperar nada más..Pasar el tiempo con Ashley era un verdadero regalo, momentos así hacen que José no quisiera apartarse de Ashley ni por un momento y por más tiempo que pasaba con ella más se apegaba. Quizas el destino..quería que Ashley estuviera junto a José, quizas..este tenía un plan para ellos..

OFF: Santiago notificame de los sucesos futuros para terner al menos una idea de que pasará y así que decir XD

-Un taxi entonces, yo también estoy algo cansada de caminar- dice soltando una pequeña risa.

Detienen un taxi y se suben en él llendo directo al hotel. Una vez que llegan ahí se dirigen a la habitación de José donde Tomás se encuentra aún tirado en la cama, observando el techo, notando como la luz ha variado desde que se marcharon Ashle y José, hace ya algunas horas.

Off: Ok Juno, te mando un mp para guiarte un poco con esto, porque realmente cambié mucho los planes xD, y bue, al hotel de vuelta xDD On:

Rozen baja del automovil y le agradece a la mujer por el aventon que les dio... al bajar todos y al irse la camioneta se dirije a todos y dice

-bien, llegamos, ahora que tenemos que hacer?-

- Dormir o comer tal vez... - Dice este con un tono cansado, habia estado varias horas usando su habilidad y eso le habia cansado bastante.

- Hay que volver a Francia... - Dice dando un suspiro...

Off: Volví!! xDDDD On:

-Si, creo que estaría bien que comiéramos algo, y luego consiguiéramos en donde dormir. Ya es muy tarde y mañana tenemos que irnos con el doc- dice Yarx rascándose los ojos.
-Si... Yo estoy cansada...- dice Asuka, lanzando un pequeño bostezo al aire.
-Bueno, primero que nada, ¿tienen al menos algo de dinero como para comprar algo de comer?- dice Blade que ya hacía un rato largo que no hablaba.

-como te dije antes, yo no tengo nada de dinero desde un encuentro que tuve en japon... y no creo que traigan los demas, espero equivocarme- decia rozen algo somnoliento, pues a tambien estaba cansado del viaje, mas por que no habia dormido desde hace mucho...