En Algún Lugar de Uruguay...

El caliente aire de verano resopla entre las copas de los árboles. Los rayos del sol son apaciguados por esporádicas nubes que cruzan por frente de él, aliviando a los secos campos. De pronto un chico aparece de la nada, es Santiago.

-¿Dónde estoy? ¿Debería regresar?- se pregunta en voz alta "La última vez que le hice caso a mi yo del futuro Dasda murió, pero... si hubiese vuelto yo hubiese muerto también... Creo que me quedaré"

Al no saber en donde está Santiago decide caminar en dirección a donde se escucha un ruido, ruido a vehículos cruzando a altas velocidades. Seguramente había una ruta, una carretera cerca de allí...

La suave brisa golpeaba delicadamente la cara de santiago y lo despeinaba ligeramente, habia algo en aquel lugar que le hacia saber... que ya estaba en casa, de vuelta en uruguay, el silencio de aquel lugar... no tardaria en romperse
-Disfrutando la vista?-
Un hombre de unos 20, quizas 25 años estaba hechado en la hierba (OFF: no, no son campos de marihuana xD)
-Vengo aqui cuando quiero descansar de mis responsabilidades... soy policia, sabes a cuantas personas me vi obligado a matar para que me sigan pagando?-
El hombre al parecer hablaba consigo mismo, aunque dentro suyo esperaba una respuesta por parte de santiago

Santiago escucha a alguien hablar y piensa que le están hablando. Luego se da cuenta de que las palabras no son para él, ni tampoco para nadie. Igualmente decide acercarse, quizás ese hombre podría decirle en donde está.

-Hola... Disculpe... No sé en donde estoy, tampoco como llegué a aquí, ¿podría decirme en dónde estoy?- dice con voz algo tímida...

-Estas en uruguay chico! no reconoces mi asento? yo reconoci el tuyo al instante... mi auto esta estacionado unos kilometros adelantes luego te llevo a tu casa si quieres... dime... tienes algun sueño? algo que te motivo a seguir adelante?-
El extraño "filosofo" no parecia alterarse por nada de lo que santiago podria decirle
-Solo dejame estar un par de horas mas aqui... y luego iremos quieres?-

Santiago mira extrañado al hombre. ¿Sueños? ¿Metas? ¿¡Un par de horas más allí, en medio de la nada!?

-Bueno... gracias... esperaré entonces... Aunque... no me refería a si estábamos en Uruguay... lo que quiero saber es si estamos cerca de Flores...-

Se hace un silencio.

-Quiero estudiar filosofía...- dice luego respondiendo a la pregunta del hombre -... y quiero volver a casa- dice luego en voz baja

-Flores? esta a un par de horas de aqui mi casa queda por alli...-
El hombre se sento para poder mirar mejor a Santiago y el arma que trai consigo
-Entonces... eres alguien como yo... tu quieres una vida simple... ya que la tuya no lo es... quieres pasar un dia sin preguntarte si alguien morira por tu culpa... no es asi? eres muy joven para tener tanta presion sobre tus hombros...-
El hombre termino de incorporarse
-De acuerdo... si tu quieres te llevo!-
El hombre tomo su chaqueta y se incorporo
-Si eso de verdad te importa yo que tu lo sostendria con todas mis fuerzas!-
Sin mas el hombre comenzo a flotar, y rapidamente tomo a Santiago y ambos comenzaron a volar a una velocidad endemoniada
-SOLO SE LLEGAR AL PUEBLO! TU ME DICES DONDE QUEDA TU CASA!-
El hombre gritaba con todas sus fuerzas, pero para santiago solo parecian susurros

Al ver como vuelan Santiago se asusta un poco. Luego se asombra.

"Así que él también tiene un poder..." piensa mientras ve como se acercan a la ciudad -Puedes dejarme a la entrada de la ciudad, voy caminando hasta mi casa es sencillo llegar-

En cuanto descienden Santiago decide contarle de su poder.

-Gracias... Aunque... no eres el único así... yo también tengo un... poder-

-QUE DICE? NO TE OIGO!?-
De repente el hombre comenzo a bajar su velocidad de vuelo y descendieron a pocos metros de la entrada de la ciudad
-Lo siento.. no quiero ser el jet privado de nadie... esto solo fue un pequeño favor me oyes?-
El hombro se sacudio el polvo de sus ropas
-En fin un gusto conocerte, que tengas suerte y puedas cumplir tus sueños...-

-Bueno gracias. Adios- dice y luego se marcha caminando por las calles de su ciudad hasta llegar a su casa...