Casa en la Playa

Francisco despierta en una cama con bases de madera. Esta vez no era un consultorio médico.

Las paredes eran de madera, y el piso igual, solo que muy bien lustrado. Adornos típicos de la playa ambientaban en lugar, cosas rastafari entre demáses.

Francisco estaba acostado en la cama, y justo arriba de él estaba bien ubicada una ventana abierta de par en par. De allí se podía escuchar el apacible sonido de las olas chocando con las rocas de la costa.

Abri los ojos lentamente, de repente me vinieron a la mente los recuerdos de la lucha con aquel tipo que tiraba fuego, volaba y se hacia invisible.

-ahh mierda...debería tener algo mas de cuidado cuando peleo...espero no haber caido en coma de nuevo- dije para mi mismo.

me levante de la cama de forma torpe, lo cual me extraño de modo que comence a examinar mi cuerpo para ve si poseia alguna que otra herida grave. Luego de esto me siento en la cama, necesitaba tiempo para entender que era lo que habia pasado en el avion.

*acaso mi poder se transformo, no lo creo...estoy seguro de que hay una relacion entre los escalofrios y el dominio de una nueva habilidad...¿acaso puedo copiar poderes de quien toque?...no creo que se almacenen ya que luego de copiar el fuego no pude utilizar el hielo...esto es una ventaja razonable sin embargo... debo estudiar esto no quisiera terminar explotando tal y como le paso a aquel tipo* pensaba mientras dirigia la mirada hacia un lugar vacio.

Luego es esto, trato de levantarme de la cama y salir a ver donde habia ido a parar esta vez. Era obvio que no estaba solo, ¿acaso lance había sobrevivido y me había traido hasta aca?.
Solo había una forma de averiguar las interrogantes, debía examinar el lugar.

Francisco decide inspeccionar el lugar, en búsqueda de alguien o quizás algo.

Este revisa tanto la cocina como la sala, lo cuál no fué tan dificil ya que la casa era de tamaño reducido, quien quiera que viviera allí no necesitaría tanto espacio. Quizás fuese una casa para una sola persona o un departamento de soltero. Como se podía saber??

Durante la inspección de Francisco este escucha lo que parece los ladridos de un perro, proveniente de las afueras de la casa.

Seria bueno salir por la puerta de entrada en la sala, a seguir investigando...

Al revisar la casa escucho los ladridos de un perro, al parecer provenientes de afuera de la pequeña casa en la playa.

Sin dudar un segundo demas me dirijo hacia la puerta del frente de la casa y la abro para inspeccionar fuera de la misa, El sol incandescente reflecta en mi cara. Sin embargo, alcanzo a ver una preciosa playa llena de arena y un agua azul cristalina.

Luego de tomarme unos minutos para observar el paisaje comienzo a dar vueltas en busca del sonido del perro que habia escuchado.

-hola...¿hay alguien hay?- pregunto inocentemente mientras busco con la mirada en todas direcciones.

Francisco logra ubicar al can corriendo de aqui y allá, por la suave arena de la playa.

Este entre sus correteos va en direción a lo que parecía ser una chica morena con rastas, con una camiseta blanca muy ancha y un Short playero negro con pequeñas franjas en los extremos de colores Jamaiquinos.

La Mujer acaricia al perro en el lomo, mientras este se para en dos patas sobre ella.

Esta se da cuenta de la presencia de Francisco y desde la distancia le saluda con su brazo derecho y una sonrisa.

Miro sorprendido a la mujer, lo mas probable es que la casa donde me encontraba fuera de ella. Luego de mi reaccion ante el saludo de la mujer me acerco para saludarla.

-Hola...me llamo francisco... respondi algo nervioso pero sin evitar tener cierta naturalidad.

no me interesaba saber como habia ido a parar a esta playa exotica, solo necestiaba saber donde estaba y ver como llegar a una de las ciudades de españa.

-esto...¿ahora mismo donde me encuentro?-

Luego de recordar esto comienzo a revisar mis bolsillos para ver so todavia tenia el fajo de billetes que me habia dejado clara en el hospital. seria un grave problema no llegar a tenerlos ya que no llevaba mas dinero que ese.

La mujer le responde mientras miraba hacia el horizonte marítimo y acariciaba a su perro.

-Estamos en una playa a 2 horas en carro de tu destino- Le anuncia la mujer, que permanecia inmutable mirando el horizonte.

-Pero la cuestión es.. si tu sabes cual es realmente tu destino, lo sabes?? Por que yo si lo sé-

Quede atonito despues de escuchar las palabras de aquella mujer.

*¿quien es esta?...¿como es posible que me conozca?...¿tendra alguna conexión con lance?* pensaba indignado

Luego de quedarme paralizado por unos segundos decidi no darle tanta importancia y seguir el juego de la mujer, la mire de nuevo con una sonrisa

-la verdad...no conozco mi destino...supongo que tu podras contarmelo...o aun que sea decirme a donde me llevara mi destino- le respondi con un tono amable a la joven.

-Eso tendrás que averiguarlo por tu cuenta, yo solo puedo indicarte donde es el camino, pero tu deberás recorrerlo y decidir si ese es el sendero que realmente quieres cruzar-

La mujer gira la mirada en dirección a Francisco, y sonríe un poco.

-Más allá casi al borde de la playa vive Mayla, comunmente le llamamos Abuela por aqui, quizás ella puda ayudarte a encontrar tu camino-

Le anuncia mientras comienza a caminar en dirección a la casa de la Abuela, indicandole a Francisco que la siguiera.

Desde su distancia no podía ver la casa de la Sra Mayla, parece que para llegar tendrían que hacer una larga caminata.

La mujer lanza fuertemente una pelota que tenía en su mano, mientras caminaba, y su perro rápidamente se adelanta en buscarla.

-supongo que no tengo opcion- dije algo desepcionado.

Hice ademanes para volar. Sin embargo, cuando lo hice solo cai al piso. al parecer mi poder ya no estaba, lo cual me tomo de sorpresa. La chica me miro por mi ridicula accion.

-estoy bien... solo me tropéese con la arena- decia con algo de verguenza, nunca habia dicho una escusa tan tonta como esa.

Despues de que me incorpore y levante trato de hacer fuego con mis manos y hacerme invisible pero como era de esperarse nada habia ocurrido.

Por un lado eso era un alivio, ya no corria peligro de terminar como aquel sujeto explotando por un desmesurado poder, pero por otro lado odiaba el hecho de que no fuera diferente a un ser humano comun.

*supongo que solo tendre que tocar a otra persona especial y con eso bastara* Pensaba mientras seguia caminando en direccion a la casa de "la abuela".


OFF: juno hasta tu aviso no tenia poderes no?

La mujer sonrié ante el extraño comportamiento de Francisco.

-Te tropiezas con arena?? jajaja ni Rony lo hace jaja- Rony era el perro quien traia de nuevo con sus fáuses la pelota arrojada por la chica.

-Buen chico- Le decia a su perro mientras recogía la pelota de la boca del perro, y la lanzaba de nuevo.

-Por cierto, me llamo Afrika, un gusto- Le dice..

le devolvi la mirada…

jejee... es que estoy algo torpe desde que me levante de la cama...supongo que esta vez no estuve durmiendo mucho no?- le decia con un tono gracioso

A decir verdad, no estaba muy seguro de esa tal "abuela" y tampoco creia mucho en el destino, pero por el momento estaba atrapado en esa playa sin ningun poder de modo que no tenia mas opcion que seguir su juego. Ademas todavia reinaba en mi la idea de que estas personas fueran conocidos de lance, despues de todo muchos sucesos extraños estaban ocurriendo a mi alrededor y no lograba entenderlos.

-mucho gusto Afrika, yo me llamo francisco...por cierto falta mucho para llegar a ver a "la abuela"?- exclame con un tono amable mientras seguiamos caminando sobre la inmensa arena.

-Ni tan lejos ni tan cerca Francisco-

Le anuncia mientras caminaba junto a él.

-No dormiste mucho la verdad, eso no fué extraño; lo extraño es como llegaste hasta acá....Verás mi religión nos enseña que todos venimos de la naturaleza, animales, plantas humanos, y que no debemos cambiar ningun aspecto nuestro con el cuál la naturaleza nos concebió-

La mujer hace una pausa y continúa..

-Tu llegaste hasta aqui, traido por el mar, alli te encontré tirado y te llevé a casa...Nunca pensé que en verdad la naturaleza nos concebiera del todo pero ayer parecía que si-

La Chica sonrié un poco.

-La marea trae basura a la costa, rara vez trae cosas de valor; veremos si al final de todo resultas de valor. Pero...más que todo para ti mismo-

caminaba junto a afrika escuchando todo lo que decía. Sin embargo, las únicas palabras que realmente me llegar de toda la porquería espiritual que dijo fue

"no debemos cambiar ningún aspecto nuestro con el cuál la naturaleza nos concebió"

esa frase se repetía una y otra vez en mi mente, de alguna manera me daba la impresión de que esa frase tenia una relación directa con mi habilidad. Sin embargo, no era momento para estar pensando en eso por ahora lo único que importaba era ir con "la abuela" , quien parecía ser un oráculo o un vidente, y averiguar que tanto sentido tenia todo esto.

Después de todo, con todas las cosas que había presenciado y experimentado, no creer en el destino comenzaba a sonarme como una estupidez.

*¿realmente existe un dios hay arriba que tiene un plan maestro para todos nosotros?...* Pensaba mientras caminaba detrás de afrika con mi habitual mirada clavada en el vació.

Al cabo de unos minutos y luego de haberme comido la cabeza lo suficiente, vuelvo a enfocar la mirada en afrika

-Sabes con lo que dices solo me causas mas intrigas...apuremos el paso... tengo demasiadas interrogantes sin respuesta y eso realmente es molesto- le dije a afrika con una mirada amigable pero con un tono serio.

-Sin interrogantes la vida del hombre sería sumamente aburrida, nada más que aprender, nada ás que investigar e indagar; simplemente el hombre se sentaría incompleto..Por otra parte por más que búscamos las respuestas a nuestras preguntas y dudas existenciales nunca podremos rersponderlas todas por más que queramos; ya que simplemente son demasiadas; y eso es un alivio...así almenos sabremos que no nos aburriremos e un buen tiempo- Le dice la mujer sonriendo.

El perro volvia con la pelota en su mandíbula y se acercaba a un lado de Africa, caminando a su mismo ritmo. Africa se inclina un poco y recoge la pelotita.

-Por lo que veo no eres un creyente, pero eso no importa, creyentes y no creyentes han recibido los consejos de la Abuela y a muchos les ha servido para continuar con sus caminos o simplemente tomar rumbos nuevos. Quizás ella pueda ayudarte a conseguir las respuestas que tanto ansías encontrar-

Anuncia la mujer y lanza fuertemente la pelota en dirección a lo que parecía una cabaña a tan solo unos cuantos metros.

-La ves?? la Cabaña.. allí es- El perro por acto reflejo va por la pelota.

Luego de haber escuchado el profundo discurso de afrika quede perplejo, no tenia idea de que existieran personas como ella en todo el mundo. Sentía una enorme curiosidad por saber que me diría "la abuela" acompañado por un leve sentimiento de miedo.

Cuando afrika menciono la cabaña, mi mirada la cual estaba clavada en el piso se levanto bruscamente hacia donde estaba la cabaña. La cabaña a simple vista era idéntica a la de afrika.

Camine algo apresurado sobre la tibia arena, con cada paso podía sentir como ese nerviosismo y curiosidad aumentaban a medida que me acercaba a la cabaña. Habia dejado a afrika unos metros atrás, pero eso ahora no importaba yo solo estaba centrado en conseguir mi objetivo.

*por fin...alguien que tiene respuestas de lo que esta pasando...*

Me encontraba inmerso en mis pensamientos y con la mirada clavada en el suelo, cuando de repente me di cuenta que una sombra me opacaba, levante la cabeza y hay estaba la cabaña a una corta distancia de mi. Mire hacia atrás a afrika y luego volví a voltear.

Golpee la puerta con suavidad

-Hola...hay alguien?- dije con la voz fina.

Francisco cuando se voltea ve como la mujer le saluda desde la distancia con su brazo derecho.

Este toca la puerta repetidas veces pero nadie contesta, tras unos momentos lo vuelve a hacer pero lo interrumpe un niño pequeño a su lado que sale como de la nada

-Buscas a la Abue??- Le pregunta.

-Ella no está en casa, fué a comprar unos víveres para el almuerzo- El niño aparta con cortesía a Fran de la puerta y saca su manojo de llaves para abrir la puerta.

-Si quieres puedes esperarla dentro, seguro volverá en unos minutos- Le anunciaba mientras giraba la llave en la cerradura y abría la puerta.

Francisco casalmente voltea en dirección a donde debería estar Africa, pero no ve a nadie nisiquiera al perro con sus ladridos. Seguro se habrán marchado a casa.

El niño era uno pequeño como de alrededor de unos 11 años de edad.

Mire al niño con una sonrisa, ocultando mi enojo y ansia de hablar con la abuela.

-creo que eso seria descortés...pero si tu lo dices...- le decía al pequeño con un tono amable.

Luego de eso voltee con una sonrisa y abrí la puerta. Entre en la pequeña cabaña y como era de esperarse no tenia nada de extraño, es mas se parecía bastante a la de afrika.

Después de largar un pequeño suspiro decido entrar, dentro de la misma me siento en el piso de madera de espaldas a la puerta.

*quizás debería replantearme todo esto...estoy aquí esperando a una desconocida...¿para averiguar mi destino?....¿o por simple curiosidad?...* Esas preguntas atormentaban mi mente.

Por ultimo decidí no darle importancia a eso y esperar paciente a la abuela, estaba convencido de que luego de escucharla algo cambiaria.

-Ponte cómodo, la abuela ha estado hablando mucho sobre ti últimamente- Le anuncia el niño mientras va a la cocina a atender unos quehaceres.

Desde allí mantiene su conversación con Francisco.

-Por cierto..vaya tormenta la que se desató ayer eh?? Mi hermanita estaba durmiendo en cama y cuando un relámpago cayó, esta del susto se cayó también! pero de la cama!! jaja Teníamos tiempo sin ver tormentas, la verdad nunca pensé que vinieran en esta temporada del año... no te parece Extraño??? Bueno tal vez es por lo que está pasando...el calentamiento global me refiero-

El Niño una vez que termina los queaceres en la cocina, se dirije a donde estaba Francisco.

-Hueles a chamuscado..... que te pasó?? te cayó un rayó?? jajajaja- Dice mientras reía inocentemente

*como pudo haber hablado de mi si no hablo conmigo en ningún momento?...esto solo alimenta mi curiosidad...acaso esta "abuela" tendrá un poder?...* pensaba mientras mantenía mi mirada perdida en el suelo.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por la voz del niño hablando acerca de la tormenta. Levante la cabeza hacia el techo mientras le seguía escuchando.

-ni que lo digas... fue una descomunal tormenta...-

Luego de mi respuesta el pequeño volvió a retomar la conversación con una pequeña broma.

-a decir verdad no me creerías si te dijera jejeje...- reía por la ironía.

hice una pequeña pausa.

-pero supongo que ahora eso no tiene importancia...-

Al parecer ese pequeño niño me había hecho recordar mi desagradable encuentro con aquel chopper, el cual había acabado con mis padres y mi hermano. No pude evitar dejar salir una mueca de desagrado en mi cara mientras guardaba silencio durante unos minutos.

La atmósfera de la pequeña cabaña había cambiado bruscamente, de un ambiente amigable a un clímax denso y pesado, me dirijo otra vez al niño.

-¿que te dice la abuela sobre mi?- pregunte amablemente.

-(Pues dice que eres un sujeto "especial" que se marchitaron tus alas en pleno vuelo y caíste en el frío suelo; ahora dependerá de ti levantarte y recuperar tu alas para tomar el camino correcto) Bueno algo así fué lo que me dijo según recuerdo-

Le dice el niño quien se rasca un poco la cabeza...

Momentos después alguien toca el timbre de la puerta.

-Abue!!- Anuncia el niño quien sale brincando alegremente hacia la puerta de la cabaña; la cual abre y se puede ver tras ella una mujer mayor, se parecía mucho a Africa, solo que esta era de edad mucho más avanzada; conservaba sus rastas y vestía de colores jamaiquinos, en una camisa ancha y un mono con detalles playeros.

-Compraste las Galletas que te pedí??-

-Si hijo..también te compré aquel balón que me pediste la vez que pasamos, te acuerdas??-[/b] Le dice la mujer sonriendo.

-Siiiiiii!!! Gracias Abue!!- Salta de la emoción el niño quien recibe su nuevo balón por parte de la abuela y sale a la playa a jugar con su nuevo regalo, dejando solos a La Abuela y a Francisco; quien cierra la puerta y anuncia al ver el chico.

-Entonces..... tu debes ser.....- Anunciaba la mujer esperando que Francisco completara su exclamación.

Gire la cabeza mirando por fin a "la abuela".

-así es...yo soy francisco...estaba esperando ansioso su llegada- dije reafirmando la oración que había comenzado la abuela.

Con la simple presencia de la anciana se denotaba algo extraño. Aun no lograba percibir que era, su aspecto era muy parecido al de afrika, si la abuela hubiese tenido un par de años menos seguramente la hubiese confundido con afrika o incluso habría pensado de que esa era afrika disfrazada. Sin embargo, este no era el caso.

-seguramente sabe porque estoy aquí...afrika me dijo que usted me ayudaría a descubrir mi destino- Dije terminando la oración con un silencio brusco.

Finalmente el momento que había estado esperando había llegado a mi, sentía algo de nervios pero era mucho mas la curiosidad que lo demás, los segundos parecían hacerse horas mientras esperaba a que la anciana comenzara a hablar.

-Mmmm Francisco eh...Ahhh ya me recuerdo de ti....Y así es... aqui te estaba esperando pero no creía que sería tan pronto- Anuncia la mujer quien coloca las bolsas en la mesa de la sala manteniendo contacto visual con Francisco...

-Afrika hizo bien en traerte hasta aquí...supongo que ya querrás que te muestre tu destino; pero hay algo que quiero que tengas en cuenta..- La mujer hace una pausa y continúa.

-Yo te mostraré las opciones y rumbos que puedes tomar.. pero solo de tí dependerá elegir cual has de recorrer y tomar. Ya que el destino no es algo fijo ni tampoco algo pregrabado, el destino solo tú lo puedes moldear a tu conveniencia y nadie más-

La mujer le hace una seña con su mano a Fran para que se levantara.

-Entonces... que dices.. proseguimos??- Anuncia la mujer la cual se mueve de su sitio y pasa por una cortina de tela conduciéndola a otra Sala.

Desde la posición de Francisco este no podía ver tras la cortina y apreciar que había dentro de la otra sala. Tenía que seguir a la mujer.

-Pasa adelante...- Anuncia con una voz cálida.

Interprete la seña de la anciana, sin embargo me quede inmóvil mientras la mujer cambiaba de habitación.

*supongo que dentro de esa habitación me mostrara todos esos rituales raros que dirán que rumbos tomara mi destino* pensaba mientras veía la silueta de la anciana desaparecer tras las cortinas.

Otra vez volví a escuchar la voz de la abuela indicándome que pasara. Me levante y camine hasta la cortina, la abrí y me senté en frente de la anciana.

-bueno...hábleme de mi destino- dije mirando seriamente a la anciana.

Ambos ahora estaban en una sala repleta de múltiples articulos espirituales y objetos religiosos, al pasar por la cortina de tela se podía sentir como la atmósfera cambiaba a una más apacible y calmada. Podías sentir como tus frustraciones dejaban de agobiar tu cuerpo y una sensación de bienestar corría en tu interior de pies a cabeza.

-Lo sientes... no?? Es Extraño verdad?? Bueno..no te explicaré la razón de por que te sientes así a menos que quieras claro, o prefieres que vayamos al grano de una vez- Le anunciaba la mujer quien se sentaba sobre una ligera alfombra de tela y sobre ella un suave cojín que combinaba con el color de la alfombra.

-Te tomaré la palabra y proseguiré con la sesión....Y recuerda...pase lo que pase no me toques mientras esté en trance; mis ojos cambiaran a una tonalidad gris y en ese entonces sabrás que estoy en ese estado-

Anunciaba la mujer quien cerraba suavemente sus ojos y meditaba sentada durante un tiempo..

Minutos pasaron y la mujer de un momento a otro abre sus ojos bruscamente, esta vez habían adquirido la tonalidad gris que había mencionado antes.

-Francisco....Fernandez.....Ya veo ahora todo con más claridad; has pasado ultimamente por un doloroso calvario, has andado entre la oscuridad la cual te ha consumido, y ahora estás en la búsqueda de algo..que ilumine tu sendero..una luz en el camino..Una recompensa tras todo lo sufrido-

La mujer hace una pausa y continúa.

-Eres un chico fuerte...pero no lo suficiene..crees no necesitar ayuda de los demás...pero no es así; has podido dar por claro eso en tu encuentro con Lance. Te has dado cuenta de que aveces necesitas ayuda para proseguir con tu camino, Lance fué tu ayuda en el pasado...ahora yo soy tu ayuda del presente...preguntame sobre las tantas dudas que te atormentan; que los espíritus y yo te responderemos con gusto....Lo primordial es disipar tus dudas existenciales, solo así la mente puede entender y sobrellevar correctamente lo que le vendrá a futuro-